Hoy vamos a estar hablando del juego en los niños, más específicamente acerca del juego de roles. Sabemos que el juego es fundamental en el desarrollo de un niño, no sólo sirve para distenderse y divertirse sino también como puente de aprendizaje: el juego es el trabajo del niño y es a través de este trabajo que el niño adquiere experiencias, se relaciona con su ambiente y consolida aprendizajes.
Entonces, ¿qué entendemos por “juego” en la infancia?
El juego infantil se define como “una actividad placentera, libre y espontánea, sin un fin determinado, pero de gran utilidad para el desarrollo del niño” (Gómez Ramírez, MD). Las cualidades de placentera, libre y espontánea debemos garantizarlas con nuestro acompañamiento inteligente.
Sigmund Freud decía muy acertadamente: “un niño juega no sólo para repetir situaciones placenteras, sino también para elaborar las que le resultaron dolorosas o traumáticas”. El juego es entonces, oportunidad para comprender y elaborar el mundo que los rodea.
El juego de roles y la filosofía Montessori
Juego de roles, ¿qué es?
Los juegos de roles, también llamado juegos simbólicos, son aquellos juegos en los cuales los niños imitan situaciones de la vida cotidiana y pueden encarnar a otras personas que no están presentes en el momento del juego. Son altamente beneficiosos ya que mediante ellos el niño puede formarse una imagen del mundo que lo rodea e ir aprendiendo y perfeccionando habilidades para manejarse en él.
Partiendo del principio Montessori de que los niños dentro de los 0 a 6 años se encuentran en plena construcción del Ser y sabiendo que para ello necesitan comprender su mundo y todo lo que los rodea, entendemos que es muy importante mostrarles la realidad tal cual es y no caer en lo fantasioso e imaginario.
Ahora bien, aquí es dónde se arma una gran confusión ya que se piensa que desde la filosofía Montessori está “prohibido” jugar a… es decir, no se avala el juego que implique roles o “hacer como sí”.
Debemos tener en cuenta que un ambiente Montessori no es un hogar; si el niño vive experiencias reales como cortar alimentos, preparar jugo, limpiar ventanas, regar plantas, etc. no existe problema alguno con que tenga representaciones de una cocinita, por ejemplo, en su casa.
En el ambiente Montessori no existe el juego simbólico porque los niños están continuamente experimentando con objetos reales y manipulando, así, la realidad. No hacen “cómo si” porque de verdad cocinan, de verdad limpian la mesa, etc.
Además, una cocinita-por ejemplo- es una réplica simbólica de algo real que existe, si al niño se le especifica que es representación de, no habría problema.
¿Por qué es fundamental el juego de roles en la infancia?
- Fomenta la creatividad,
- Estimula el desarrollo del lenguaje; ya que los niños verbalizan continuamente mientras los realizan,
- Regula emociones; ayuda a expresar emociones y sentimientos,
- Favorece la resolución de problemas; sabrá cómo actuar en ciertas situaciones que ha “actuado” en su juego,
- Desarrolla habilidades sociales; ayuda a comprender y ponerse en el lugar de los diferentes roles de la sociedad,
- Ayuda a encontrar su propio lugar en la sociedad.
¿Cuál es la edad propicia para introducirlo?
El juego simbólico predomina entre los 2 y 6 años del niño y claramente irá variando conforme el niño crezca. En el juego simbólico los niños reflejan el conocimiento de la realidad que viven, cuanto más variada sea su realidad más variada será la gama de juegos y roles que utilicen.
Tips para estimular el juego simbólico en casa:
- Tener algún kit de juego de roles: médico, cocina, herramientas, muñecas. Pueden ser hechos por nosotros, no necesariamente comprados.
- Ayudemos a los chicos a recrear personajes, démosle ideas y propongamos nuevos personajes y contextos.
- Jugar con los hijos: es muy importante hacerse un tiepo y disfrutar de ese momento.
Juego de Roles Amigables para hacer en casa:
Jugar con muñecos forma parte del desarrollo de los niños desde pequeños, y conforme el chico crezca irá adquiriendo diferentes roles y asumiendo distintos argumentos en su juego.
Jugar con nuestra muñeca Mamá Gaia puede abrir un abanico de oportunidades ya que los niños pueden jugar a ser madres y padres, ser médicos, ser profesores, ser la Madre Tierra, etc. Y el juego de “hacer como si…” con Mamá Gaia puede ayudar a los niños a entender, interpretar, transformar y expresar tanto la realidad que los rodea donde reviven situaciones diarias y las recrean de forma sana, como también a expresar sentimientos que aún no saben comunicar con palabras.
Jugar con muñecos ayuda a resolver miedos y conflictos afectivos, así como también repetir situaciones placenteras. Los niños podrán, así, practicar y ganar confianza para relacionarse en la vida real.
Sofía O´Farrell
Psicóloga y Guía Montessori.
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𝗘𝗱𝘂𝗰𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝘆 𝗲𝘀𝘁𝗶𝗺𝘂𝗹𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝘁𝗲𝗺𝗽𝗿𝗮𝗻𝗮 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗯𝗲𝗯é𝘀 𝘆 𝗻𝗶ñ𝗼𝘀.
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